Este es un blog que escribo 0.01% del tiempo porque me apasiona, llena, bla, bla, bla (inspiración) y 99.9% del tiempo por la autodisciplina de publicar (transpiración).
Llevo décadas queriendo hacer las cosas priorizando lo primero y hasta ahora eso no ha llevado a nada duradero.
Este experimento, en cambio, ha sido más efectivo porque no importa lo motivado que me sienta a decir algo original, el show debe continuar.
Eso sí, cuenten con que siempre publicaré sobre un hecho que me despabila y cada artículo contendrá mínimo una breve reflexión personal.
Los invito a dejar que su amarillismo efímero y superficial los seduzca y sigan mi blog, que aún en su simplicidad me exige tiempo, voluntad y el sudor que queda tras ganar extenuantes batallas mentales contra el pesimismo.